El Cementerio de la 30 de Marzo: Un tesoro histórico que Santiago debe redescubrir para el Turismo
Este camposanto, fundado en el siglo XIX, no solo alberga los restos de figuras emblemáticas de la vida política, militar y artística de la República Dominicana, sino que también constituye un espacio donde convergen la memoria colectiva y la identidad nacional.
Segunda parte…
UNA JOYA PARA EL TURISMO CULTURAL DE SANTIAGO
POR YAMIRA TAVERAS (Fotos y videos Yamira Taveras)SANTIAGO DE LOS CABALLEROS, República Dominicana. En el Cementerio de la 30 de Marzo la historia no se exhibe, se respira. Es sin dudas un libro abierto de la historia nacional.
Entre sus tumbas, mausoleos y lápidas, yacen los restos de hombres y mujeres que marcaron el rumbo político, social y cultural de la República Dominicana. Es, sin exageración, un panteón de la memoria nacional, oculto a plena vista en el corazón de Santiago de los Caballeros.
En este museo a cielo abierto descansan tres expresidentes de la República, figuras fundamentales para entender las grandes transformaciones del país a lo largo de los siglos XIX y XX.
Ulises Francisco Espaillat, símbolo del pensamiento liberal del siglo XIX, Rafael Estrella Ureña, político clave en la transición que puso fin a la dictadura de Horacio Vásquez y abrió el camino para el ascenso de Trujillo y Don Antonio Guzmán Fernández, presidente entre 1978 y 1982, recordado por su impulso a la modernización democrática, su compromiso con los derechos civiles y por haber puesto fin a doce años de hegemonía balaguerista.
También descansan allí figuras que marcaron la vida cultural y educativa del país, como Ercilia Pepín, pionera de la educación dominicana, escritora y defensora de los valores patrios en las aulas; o Virgilio Martínez Reyna, poeta y político cuya voz resuena todavía entre quienes aman las letras y las luchas cívicas. El arte también tiene su espacio en Yoryi Morel y Federico Izquierdo, ambos pintores costumbristas, capturaron con pinceladas la esencia de la vida cotidiana dominicana.
Otros nombres hablan de espiritualidad, como Samuel Mills, fundador de la Iglesia Evangélica Metodista Libre en el país, o de música y cultura popular, como Ramón Emilio Peralta, creador de la Banda Municipal y fundador de la academia de música de Santiago.Y por supuesto, entre tantos, Máximo Grullón Salcedo, restaurador y combatiente por la soberanía nacional, descansa también bajo estas sombras.
También reposan allí nombres como el del empresario José Manuel Glas, una figura clave en el desarrollo urbanístico y económico de Santiago en el siglo XIX, cuyo mausoleo es una obra de arte traída desde Europa; el de Daniel Ortiz, protagonista de una historia de injusticia que conmocionó a la sociedad de su tiempo; y el conjunto de jóvenes deportistas de la Tragedia de Río Verde, cuyos sueños fueron truncados por un fatídico accidente aéreo que todavía resuena en la memoria colectiva del pueblo dominicano. También están los mausoleos de grandes familias santiagueras de esta época.Entre estas otras figuras sobresale el nombre del explorador sueco Erik Ekman, quien llegó desde Estocolmo a la República Dominicana en 1924 con fines científicos, pero terminó enamorado del país al punto de quedarse hasta su muerte en 1931. Ekman contribuyó más al conocimiento de la flora de las Antillas que cualquier otro científico antes que él, describiendo más de 2,000 especies nuevas para la ciencia. Su legado vive también en las calles que hoy llevan su nombre.
Todos ellos forman parte de la riqueza histórica sepultada en el Cementerio de la 30 de Marzo, que solo, durante un recorrido guiado, se puede sentir y reencontrarse con las raíces más profundas de la historia dominicana.EN DATOS:
- Ubicación: Calle 30 de Marzo, Santiago.
- Orígenes: El cementerio tiene sus raíces en la reubicación de un cementerio anterior y la incorporación de cementerios católicos y cosmopolitas.
- Significado: Refleja la historia de Santiago, mostrando la evolución arquitectónica funeraria y la diversidad de estilos y origen de las tumbas.
- Valor cultural: Es reconocido como patrimonio cultural y museo a cielo abierto, con valor arquitectónico, histórico y tangible.
- Riqueza cultural: Está impregnado de testimonios orales y rituales relacionados con el vudú dominicano, especialmente la figura del Barón del Cementerio. Tumba más antigua: La tumba más antigua data de 1855.
- Mártires de la Restauración: En este lugar fueron fusilados los primeros mártires de la guerra de la Restauración.
- Arquitectura: Abarca una amplia gama de monumentos funerarios de distintos estilos, reflejo de la inmigración y la influencia de diferentes culturas en la ciudad.
- Estado actual: Algunos mausoleos y lápidas están arropados por maleza, pero se están realizando esfuerzos para preservar este patrimonio cultura
Entre el Olvido y la Esperanza: La Lucha por Preservar un Patrimonio Vivo
Caminar por el camposanto es, al mismo tiempo, una experiencia sobrecogedora y reveladora. Mientras algunos mausoleos lucen majestuosos, otros permanecen semienterrados por la maleza, cubiertos por el tiempo y el descuido, como si la historia intentara hablar a través de las grietas.Sin embargo, no todo está perdido. Gracias al trabajo de investigadores, instituciones educativas como la PUCMM, y el respaldo de la declaratoria oficial como Patrimonio Cultural y Museo a Cielo Abierto, se están realizando esfuerzos concretos para su conservación. La restauración de mausoleos, el diseño de rutas patrimoniales, y la inclusión del cementerio en planes de turismo cultural abren la puerta a un futuro en el que estos espacios vuelvan a ocupar el lugar que merecen en la memoria colectiva.
Preservar este cementerio no es solo una cuestión estética o académica, es un acto de justicia histórica. Es permitir que las historias aquí sepultadas sigan siendo contadas, que sus protagonistas no desaparezcan entre la hierba y el silencio, y que Santiago redescubra, entre mármol, cemento y hierbas, una parte esencial de sí misma.
-Continuación tercera y última parte..