Cecilia Mutual – Vatican News
El don del Espíritu Santo, nos hace experimentar, incluso en la vida cotidiana, la presencia y la cercanía de Dios, haciéndonos morada suya. Lo recordó el Papa León XIV en su reflexión previa a la oración del Regina Coeli, este último domingo de mayo.
Asomado desde la ventana del Palacio Apostólico, por primera vez desde su elección como Pontífice, el Santo Padre reflexionó sobre la lectura propuesta por la liturgia del día, que describe la despedida de Jesús de sus discípulos el día antes de su muerte y el anuncio del don del Espíritu Santo.
Después de saludar a los numerosos fieles congregados en una soleada plaza de San Pedro, el Papa, al inicio de su alocución, les agradeció por el afecto que le han demostrado en estos primeros días de pontificado, pidiéndoles que continúen apoyándole con la oración y la cercanía.
